Cuidado de la piel en época FRÍA y LLUVIOSA

A pesar de que en nuestro país no existen las estaciones, durante el mes de noviembre del presente año, y según fuentes oficiales, hasta mediados de diciembre del 2020 se extenderá la temporada de lluvias en Colombia y con este aumento en las precipitaciones, también vienen la humedad, los vientos y un descenso en la temperatura.
Dichas bajas temperaturas causan cambios en la piel y en las mucosas (ojos, nariz, labios), ya que ocasionan una contracción de los vasos capilares (vasoconstricción), lo que podría disminuir el aporte de oxígeno y nutrientes a la piel, retrasando su proceso de recambio y favoreciendo la acumulación de la capa córnea o capa más externa de la piel.
Por otra parte, la secreción de grasa por parte de las glándulas sebáceas también disminuye y el agua de la epidermis se evapora más fácilmente, causando un aparente deterioro en la luminosidad, lozanía e HIDRATACIÓN de la piel, lo cual aumenta igualmente su sensibilidad.
Es por esto que durante esta época de “invierno”, te damos algunas recomendaciones para cuidar la piel y las mucosas:
1. Evita los cambios bruscos de temperatura que se pueden dar gracias al uso de aires acondicionados o calefacción, ya que ambas circunstancias en temperaturas inadecuadas o extremas, secan la piel
2. Usa agua tibia o fría para el baño, ya que a pesar de que con el frío nos gusta mucho más un baño caliente, el agua a altas temperaturas resecan más la piel
3. Trata de usar sustitutos del jabón para la piel del cuerpo, llamados syndets, ya que aparte de ejercer su función limpiadora en los sitios necesarios (axilas y genitales), son agentes con un pH parecido al de la piel, lo que evita la alteración en dicha barrera protectora y algunos de ellos pueden tener propiedades emolientes y humectantes
4. Para la limpieza de la cara, evita el uso de jabones agresivos como exfoliantes con microgránulos y tónicos con alcohol, ya que resecan más la piel. Recomendamos el uso del AGUA MICELAR MEIK como tónico facial antes del protector solar, limpiador, desmaquillante, hidratante y como calmante luego de la afeitada, que gracias a su extracto de Lychee, Ramnosa, Silicio Orgánico, Vitamina E, Aloe Vera y Manzanilla, cumple a cabalidad la función limpiadora, hidratante y calmante, tan necesaria por estos días
5. Usa a DIARIO el protector solar, ya que a pesar de que estemos en temporada de lluvias y sea poca la exposición solar que tengamos, realmente lo que causa daño en nuestra piel es la radiación, la luz blanca y la luz azul (computadores – celular), por lo cual es indispensable su uso, independientemente del clima en el que estemos
6. Hidrata tu piel a diario y varias veces al día, con una crema hidratante recomendada por tu dermatólogo, de acuerdo a tu tipo de piel, la zona a hidratar (cara o cuerpo) y las enfermedades de base que tengas, ya que el frío puede predisponer a su exacerbación, como por ejemplo la dermatitis atópica
7. No olvides hidratar tus mucosas (ojos, nariz y labios), para esto te recomendamos aplicar gotas, llamadas lagrimas artificiales en cada ojo a necesidad; hidratantes comerciales como la vaselina para por dentro de las fosas nasales; y el PROTECTOR LABIAL DE MEIK para los labios, el cual gracias a su Manteca de Karité, Cera de Abejas, Extracto de Açaí y Vitamina E, además de su SPF30, te brinda una excelente hidratación y humectación
8. Protégete del frío, con la indumentaria o ropa adecuada. El material idóneo es el algodón, por eso evita los tejidos sintéticos directamente con la piel, ya que estos la pueden irritar
9. Por último, sé cauteloso con la elección del maquillaje que vayas a usar, ya que debido a la resequedad, la piel está más sensible. Elige productos con antioxidantes, sin parabenos ni fragancias, hipoalergénicos y que refuercen la protección solar… y aquí es imposible no recomendarte nuestro POLVO COMPACTO MEIK
Esperamos que siguiendo todas estas recomendaciones, podamos aportar al cuidado de tu piel durante esta temporada fría y de lluvia, garantizando la hidratación de la misma y evitando así su deterioro, en el corto y largo plazo.